Uribia revive 30 años de historia del Festival de la Cultura Wayuú con el emotivo foro Remembranzas e Historia, institucionalizando su memoria cultural
En Uribia se realizó uno de los actos más conmovedores de su historia reciente: el Foro de Remembranzas e Historia, un evento que se convirtió en un homenaje vivo al origen, a la resistencia cultural y al legado del Festival de la Cultura Wayuú en su edición # 30.
El foro, concebido y moderado por la secretaria de Asuntos Indígenas, Nereida Olidey Henríquez Gómez, reunió a los protagonistas que han tejido el festival desde sus inicios en los años 85-86, cuando aún era conocido como Festival del Friche. La jornada marcó un hito en la capacidad de Uribia para reconocerse en sus raíces y proyectarse hacia el futuro.
El epicentro de este gran evento fue la antigua terminal de transporte, que hoy en día se ha convertido en la Central Turística de Uribia, gracias a la gestión incansable del alcalde y su equipo de gobierno.
El liderazgo institucional que hizo posible el retorno
La secretaria Nereida Henríquez Gomez , por su parte, fue destacada como la ideóloga del foro, articulando un evento profundamente simbólico que combinó panel, memoria, puesta en escena y entrega de categorías institucionalizadas.
Un foro donde habló la memoria
El alcalde Jaime Luis Buitrago García tomó la decisión de reactivar el festival después de casi ocho años de suspensión, devolviéndole al municipio uno de sus pilares identitarios.
El escenario fue ocupado por cinco voces centrales:
• María Concepción Iguarán, memoria viva de los primeros festivales.
• Rosa Iguarán, una de las majayüt más emblemáticas del territorio.
• José Reinaldo Velásquez, escritor y guardián de la memoria histórica.
• Guillermo Ojeda, figura clave en la gestión y defensa del patrimonio cultural wayuú.
• Billy Berthel —figura joven y reciente en los últimos festivales— permitió hilar los relatos más antiguos con los desafíos del presente.
La escena no fue un protocolo: fue una reconstrucción viva del tejido social que sostuvo el festival durante tres décadas.
El foro marcó un precedente: por primera vez se adoptaron categorías de reconocimiento cultural que permiten ordenar, proteger y honrar la historia del festival.
Estas categorías fueron:
- Casa Emblemática de Majayüt: Acá se desataca a familias cuyo eirukuu, formación ancestral y aporte cultural han dejado huella en la historia del territorio, y las que más majayut ha tenido en la historia del festival.
Se reconoció a la familia Morales Hernández Epieyú: Se resalto el papel de las madres wayuú, según lo dicho por Brunilda Morales, el reconocimiento no es solo para su madre Ana Epieyú, sino a todas las madres wayuú, que han formado mujeres wayuú a lo largo de la historia. Con ella recibió el homenaje, Sandra Morales Hernández y Ziruma Morales.
También fue condecorada la familia Martínez Epieyú: cuya Madre Carmen Epieyú, mujer de avanzada edad recibió el galardón en compañía de sus dos hijas, Adalcinda y Eileen Martínez Epieyú, recibiendo el galardón de manos de la gestora social Nancy Gómez, y el secretario de gobierno René Lindarte Velásquez.
- Guardián de la Historia Wayuú
Exalta a los custodios de la memoria oral y escrita del territorio, su labor ha permitido que las nuevas generaciones comprendan la importancia del festival, conozcan su origen y valores el camino recorrido, destacando al historiador Eden Vizcaino.
3. Cimientos del Festival
Esta categoría destaca a quienes levantaron las primeras versiones desde los patios, enramadas y fogones familiares, cuando el festival no contaba con escenarios formales.
En esta categoría recibieron homenaje póstumo Nohora Díaz de Berthel, y María Idalides Plata de Brugés.
Reconocimiento en vida:
Consuelo Bustos Bolaños , Luis Mejía Sarmiento, y Alicia Castillo Freyle.
- Mujeres fundadoras de enramadas y gastronomía wayuú
Aquí se rindió tributo a las mujeres que abrieron sus primeras enramadas para recibir a propios y visitantes cuando el festival era comunitario, transformando su cocina en un símbolo de identidad, dieron origen a uno de los elementos más emblemáticos del festival: la cocina como espacio de encuentro, palabra y tejido social.
Homenajeadas:
Nazly Silva, Olivia Henríquez, Teresa Barros, Catalina Cotes, Martha Mejía Epieyú, Doris Gutiérrez, y homenaje póstumo a Josefa Sierra.
5. Gestores Culturales Emblemáticos
Este fue un reconocimiento a quienes han promovido la cultura wayuú desde diferentes frentes: danza, música, formación cultural, organización comunitaria, investigación, artes escénicas y gestión logística del festival. Porque en 30 años el festival no habría crecido sin gestores comprometidos que trabajaran silenciosamente detrás de cada edición.
Reconocidos:
Rita Fince, Joaquín Prince, Yajaira González, Isaac Gámez, Sergio Cohen, Dilia Fernández y Guillermo Ojeda; con homenajes póstumos a Enrique Ipuana; a la legendaria Cecilia Bonivento Jusayú; Antonio Gómez Ipuana -Chai-, a Jorge Henríquez Apshana, reconocido músico tradicional.
5. Periodistas y Narradores del Territorio
Exalta a quienes han contado la historia del festival y preservado su memoria pública, siendo las voces más representativas.
• Familia de Pedro Pablo Puerto Mejía (póstumo)
• Narciso Martínez (en vida)
Cada categoría fue presentada desde un fundamento cultural que explicó su sentido y legitimidad, lo que elevó la jornada a un nivel patrimonial sin precedentes.
Un cierre que confirmó el espíritu del evento
al finalizar, la secretara de Asuntos Índígenas de Uribia, Nereyda Henríquez expresó: “Hemos vivido un acto de memoria, de gratitud y de reconocimiento colectivo.
